Construir un hogar, NO una casa.
El hogar, como cualquier otra empresa, nos exige hacer planes. Se deben determinar los objetivos a alcanzar, con el propósito de definir estrategias, distribuir responsabilidades e implementar normas. Por supuesto, es necesario también hacer una evaluación para darnos cuenta de si la familia y el hogar están gozando de bienestar, saber si estamos avanzando.
Todos anhelamos que el hogar marche «sobre ruedas». Deseamos que las cosas funcionen y que lo hagan bien, y puede ser que en ese legítimo deseo lleguemos al punto de olvidar que las personas son más importantes que las cosas. Cuando esto suceda, es posible que nos volvamos rígidos e intolerantes. Olvidamos que el hogar es el único lugar en el que podemos desarrollar salud mental hasta llegar a la madurez total.
Estoy de acuerdo con que las reglas deben cumplirse, pero también es importante contar con cierto grado de flexibilidad, para que quienes conviven en un hogar se sientan felices y satisfechas en su seno. Esto es algo que le costo a Marta entender “estas llena de muchas cosas”
Por supuesto, el equilibrio también ha de tomarse en cuenta. Los extremos no son buenos. Ni la tiranía será la solución para guiar el hogar por buen camino, ni tampoco lo será dar «carta libre» para que cada uno haga lo que mejor le parezca.
Una vez que hayamos decidido adoptar una postura más sabia, prepárate. Para ser flexible es importante que tomes en cuenta los siguientes aspectos:
_Los miembros de una familia son individuos con necesidades, intereses y edades diferentes.
_Todos deben colaborar en el hogar con las capacidades que poseen.
_El hogar está al servicio de sus integrantes, no sus integrantes al servicio del hogar. Esto quiere decir que cada espacio debe ser funcional, cada regla debe ser lógica y cada tarea adecuada a la persona encargada de realizarla.
_Cumplir las normas debe causar bienestar y no malestar.
_Las normas deben cambiar paulatinamente, a medida que la familia evoluciona.
_La madre es la reina del hogar, no un policía, menos una empleada...
_El Padre es un FACILITADOR, no una máquina...
Que todos los miembros del hogar busquen juntos entronizar a Cristo en todo lo que hagan como familia, debe ser tu mas grande objetivo, que desnuda tus prioridades.
Quiero pedirte que medites en esta cita bíblica que enmarca el anhelo de Dios para tu Familia.
Salmos 128:1-4 ¡Dios bendice a todos los que lo obedecen y siguen sus enseñanzas! 2-3 Si tú eres uno de ellos, Dios te bendecirá mucho. En el seno de tu hogar comerás y disfrutarás de lo que ganes con tu trabajo.
Tu esposa tendrá una gran descendencia. ¡Parecerá un racimo de uvas! Nunca en tu mesa faltará comida, y tus hijos crecerán fuertes como los olivos. 4 ¡Así es como Dios bendice a todos los que lo obedecen!
MOMENTOS TG
La familia es un hogar, no un campo de entrenamiento militar.